No pude ver el programa entero, me tocó trabajar, solo vi unos minutos, los últimos del debate. A las personas que les he preguntado me han dicho que el programa les aburrió un poco, aunque no tanto por Zapatero como por las preguntas que le hicieron, la mayoría sobre la crisis. La nota dulce del programa fue que una sindrome down le pidió trabajo, situación a la que respondió Zapatero con su simpatía habitual. La niña, Izaskun, se fue encantada con él.
A mí me parece que hace falta tener valor y sentido de responsabilidad para aparecer en este programa en este momento concreto, en el que la situación económica es pésima y con un pronóstico bastante negativo, y cuando sabes que tu popularidad va bajando cada día. A Rajoy también le han invitado y sin embargo ha declinado la invitación hasta después de las elecciones vascas.
Lo que poco que le escuché me pareció acertado, en su papel, dando ánimos, esperanza, pidiendo sobre todo mucha confianza,a pesar de la situación tan dura en la que nos encontramos.
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